1. Haz una lista (¡sí, sí! Es tan importante como la de regalos que lleva escrita meses…)

A la hora de viajar es lo primero. Piensa en distintas categorías: ropa, documentos, aseo… Hay tantas categorías disponibles como espacio hay en tu maleta. 

Es muy importante tener todos los papeles a mano, tanto documentos personales como resguardos o reservas de los destinos, transportes, etc. Te recomendamos imprimirlo, aunque ya todo se haga de forma online, por si te quedas sin batería en algún dispositivo móvil. Guárdalo en un sobre o funda de plástico y tenlo a mano en un sitio seguro. 

Ahora hay un par de artículos que no deben faltar ni en la maleta ni en un bolso o mochila: gel hidroalcohólico y mascarillas. Imprescindible. Es recomendable llevar una de tela y quirúrgicas y en cantidades considerables, recuerda que puede romperse o ensuciarse y cambiarse cada ciertas horas.

 

2. No lleves más de la cuenta (No te toca a ti estar cargado estas fiestas) 

 

Cuando hacemos la maleta tendemos a llevar muchísimas cosas. Si hay sitio… ¿por qué no llevarlo? Ese un otro error que hemos cometido todos. Piensa en las actividades que vas a realizar, llévate ropa justa y prendas cómodas y combinables. Así, si compras algo tienes sitio para guardarlo. ¿Quién no ha tenido que ponerse abrigo sobre el abrigo para poder cerrar la maleta?

Recuerda lo visto en el primer punto de la lista: ahora hay algún extra que tienes que guardar en la maleta, así que hay que dejar hueco para el kit COVID.

 

3. Compra un adaptador de corriente

Un error común a la hora de viajar es creer que en todo el mundo los enchufes son iguales. Para salir de dudas y ahorrarte verte en el extranjero sin batería y sin hablar el idioma llévate un adaptador universal. Pero lo más importante… ¡No te olvides los cables!

 

4. Dinero en efectivo.

Es cierto que, especialmente en estos tiempos, el dinero en efectivo ha quedado relegado a un segundo plano. Pero nunca está de más tener a mano un mínimo por si compramos en vending o hay que dejar una propina. 

Ahora es recomendable manejarse casi por completo con tarjeta para evitar el contacto con algo que ha pasado por muchas manos, pero nunca viene de más llevar algo desinfectado en el bolsillo. 

 

5. Estudia el calendario y reserva con tiempo.

Si no vas a un lugar conocido en unas fechas tan señaladas como Navidad es fundamental estudiar el calendario. No todos los países tienen la misma tradición, los días festivos no coinciden, los horarios cambian… 

Una vez los tengas claro, piensa en si hay algo que te haga especial ilusión. Reserva cuanto antes para asegurarte plaza, lugar o mesa y también para ahorrarte un dinero. 

Ahora especialmente, que cada lugar tiene sus restricciones de movilidad y horarios que además cambian continuamente, hay que estar al tanto. 

 

6. Planifica la ruta y qué consideras imprescindible (Lo sentimos, no está la cosa para improvisar)

¿Qué te hizo decantarte por ese destino? Seguro que se te ha venido algo a la cabeza. ¡E incluso varias! Prepara un poco el recorrido para que no te pierdas los lugares que más te apetezca conocer y no te olvides del punto 7: reserva. Ahora se han limitado aforos y es prácticamente imposible improvisar.

 

7. Inmortalizar recuerdos

En Hostandboat creemos que hay una cosa imprescindible cuando vas a hacer un viaje: algo para hacer fotos (la cámara o el móvil) con espacio. En Navidad todo se llena de magia, de luz y de ilusión. Y no vas a querer olvidar el viaje nunca, especialmente si compartes el viaje con una personas a las que quieres. 

Hay que tener mil ojos para hacer fotografías ahora. Ten cuidado con las distancias, con si se puede bajar la mascarilla unos segundos para hacerse la foto o no… ¡queremos un recuerdo agradable! Aunque desde luego, una multa será una anécdota inolvidable. 

 

8. Evitar aglomeraciones. 

Si algo sabemos sobre el virus, es que la mejor cura es no contagiarse. La distancia social es uno de los principales remedios. Creemos que no hay que vivir con miedo, pero hay que tener todas las precauciones que estén en nuestras manos. 

En Navidad son muy muy típicos los mercadillos, las plazas abarrotadas, las terrazas con sus estufas, los paseos de horas bajo las luces… pero este año tenemos que intentar reducir el contacto al mínimo. 

Por eso te recomendamos las que creemos que son las mejores vacaciones y las más seguras en tiempos de pandemia: viajar en barco. Esta fantástica opción te permitirá hospedarte con distancia considerable de otros viajeros, tener tus propios horarios, tener más libertad de movimiento…

 

¡Entra en hostandboat.com para descubrir todas las posibilidades!