Grecia es, fue y será un lugar histórico lleno de magia e historia. Es por ello que el país tiene un magnetismo especial que atrae a turistas de todo el mundo, especialmente interesados en historia antigua y mitología. En Europa, fue la cuna de la ciencia, la política, el arte… de la civilización occidental en general. Por todo ello tiene cientos y cientos de sitios que visitar. 

Para que unas vacaciones salgan perfectas y todos disfruten al máximo de la experiencia, hay que organizar una ruta para no perderte ningún lugar, y eso es lo que traemos hoy: ¡una ruta por las Islas Cícladas!

Son un archipiélago de más de 200 islas, situadas en el Mar Egeo. Es uno de los lugares más visitados de toda gracia, ya que tiene oferta de ocio para todos los gustos: historia, naturaleza, calas de ensueño, pueblos grandes, pequeños, playas abarrotadas, playas desiertas…

 

Lavrion – Kea (Ceos)

Lavrion, situado en la isla de Lemnos. Es el punto de partida de nuestro viaje. Este lugar fue famoso en la Antigüedad por las minas de plata, por lo que era una ciudad clave para la capital de la Antigua Grecia, Atenas. En su momento albergaba una fábrica de monedas imprescindible para los atenienses. 

Desde allí partimos a Kea, a muy poca distancia en barco de Lavrion.

 

Kea(Ceos) – Syros

Kea, también conocida como Ceos, es una isla muy cerca de Atenas. De hecho, no es solo un destino de turistas: los propios atenienses, que tienen este paraíso a menos de una hora de distancia en barco.  

Ceos es una isla plagada de colinas tiene un clima un poco más seco que lo habitual en Grecia, pese a su ubicación. 

Sus playas son excepcionales. Especialmente las playas de Corisia, Gialiskari o Pisses. Allí los atardeceres son espectaculares.

Otras visitas imprescindibles son al León de Loulis, una escultura de 6 metros hecha con granito que es uno de los principales atractivos del destino, y las ruinas del templo de Apolo y Atenea o el Museo Arqueológico, que te permitirá entender a la civilización de la Antigua Grecia de primera mano. 

El siguiente destino es Syros. 

 

Syros – Mykonos

Syros o la isla de Siros, está situada en el centro del archipiélago. Su paisaje es muy completo, pues tiene zonas de montaña pero a la vez llanuras y zonas de cultivo. 

Es un sitio muy especial porque, según restos arqueológicos, ya era una isla habitada en el Neolítico, lo que hace que la riqueza histórica y arqueológica de la isla sea excepcional. Es por ello que recomendamos de nuevo una visita al Museo Arqueológico…¡es el sitio perfecto para aprender sobre la isla!

Desde aquí navegamos hacia Mykonos. 

 

Mykonos – Paros

Es uno de los lugares más famosos de todo el país. Lo llaman “la perla griega del Mediterráneo”. 

Según la mitología griega, la isla fue bautizada como Mykonos, el nombre del hijo de Apolo. (un sec que me suena raruno) También cuentan que en esta isla estaban enterrados los gigantes a los que venció Heracles.

Sus playas son de arena suave y fina y aguas transparentes y calmadas, idílicas. También es un buen destino de ocio tanto de día como de noche, pues hay ambiente todo el día. 

La capital es Chora, una visita obligatoria en esta isla.  

 

Paros – Serifos

Continuamos la navegación hasta Paros, la tercera isla más grande de todo el archipiélago que además está situada en pleno centro del mismo. 

Como las demás, también goza de siglos de historia. 

Esta isla tiene muchas calas pequeñas y dos bahías, la de Naussa y de Parikia. Las playas, paradisíacas, son famosísimas, y atraen tanto a turistas nacionales como internacionales. Es ideal si queréis un descanso del viaje en un lugar tranquilo pero precioso y único. 

 

Serifos – Kythnos

Otro lugar cargado de mitología. Aquí se encuentra la Cueva de los Cíclopes. También hay rocas muy particulares cuya forma parece humana, que te traen a la mente los mitos de Medusa.

Todo el mundo coincide en que las playas de la isla son magníficas. Un ejemplo clarísimo son Koutalas y Sikamia. No solo por la calidad de las playas, sino porque el ambiente muy atractivo y magnético. 

 

Kythnos – Lavrion 

Para finalizar la ruta llegamos al último destino, desde el que volveremos al punto de partida. Estamos hablando de la isla de Kythnos, también conocida como Citnos, una acogedora isla que contiene más de 70 playas bañadas por las turquesas aguas del mar Egeo. Lo increíble de esta isla es que es un paraíso poco explorado, aún estando cerca de las Islas Cícladas más pobladas. 

Muchas de sus playas no son accesibles por carretera, lo que las hace aún más íntimas, con lo que tenemos que caminar o anclar el barco para disfrutar de un día de buceo y Sol con unas vistas realmente indescriptibles. Lo que destaca de esta isla es el istmo en forma de media luna que podemos encontrar en sus costas. Pero además de ser hermosa por fuera, la isla de Kythnos esconde sitios arqueológicos, museos y una cueva inexplorada que puede ser el lugar para una aventura perfecta,  la cueva Katafiki, en Driopida, una de las más grandes de Grecia. A la ciudad principal de la isla se le comenzó llamando Termia, aunque ahora se la conoce por el mismo nombre de la isla, por los manantiales termales de la parte noreste de la isla, según lo que dicen, ¡con propiedades curativas! Sin duda, una isla que guarda muchos secretos y rincones mágicos para todo aquel que se anime a descubrirlos

Para visitar el archipiélago, el transporte ideal es el barco. A muchas islas es prácticamente la única forma de acceder, y más aún si quieres visitar algún lugar más escondido o menos masificado por el turismo. 

Tus propios horarios, tu ruta personalizada—para que no pierdas el tiempo en actividades que no te llamen la atención—, tu propio ritmo… y encima son vacaciones COVID-free. 

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